Con motivo del Día Mundial Sin Tabaco, que se celebra cada 31 de mayo, el Consejo General de Dentistas de España recuerda los graves efectos del tabaquismo sobre la salud, en especial sobre la salud oral, y destaca el papel esencial que pueden desempeñar los dentistas tanto en la detección precoz de lesiones como en el apoyo al abandono del hábito tabáquico.
El consumo de tabaco sigue siendo una de las principales
causas prevenibles de enfermedad y muerte en el mundo. En el ámbito de la salud
oral, está directamente relacionado con enfermedades graves como:
Cáncer
oral y de orofaringe: se diagnostican aproximadamente 8.000
nuevos casos anuales en España, con una relación directa con el
tabaco en el 90% de los diagnósticos.
Enfermedad
periodontal: los fumadores tienen entre 2 y 6 veces más riesgo de
padecer periodontitis, una patología que puede llevar a la pérdida
dentaria.
Retraso
en la cicatrización tras cirugías orales e implantes.
Halitosis,
manchas dentales, disminución del gusto y de la salivación.
Desde la consulta dental, el profesional puede detectar
signos precoces de daños provocados por el tabaco incluso antes de que el
paciente experimente síntomas. Además, el dentista está capacitado para ofrecer
consejos, seguimiento y estrategias motivacionales para apoyar al paciente en
su proceso de deshabituación.